Sistema

El sistema se habia caido. Tranquilamente se acercaron a pedirle que lo arreglara, pero se nego. Fingia estar ocupado mirando la computadora, que se perdio la cara de sorpresa de su jefe.

Cada que la impresora no servia, el la arreglaba, les daba mantenimiento al disco duro, respaldos al servidor, hasta cuando el mouse estaba atorado le pedian ayuda. Pero se volvio una mania y un escape para irse a desayunar. Con que tranquilidad le decian al jefe que su pc esta descompuesta, y como no podian trabajar regresaban en un rato, mientras el estupido y servicial compañero de pc, se quedaba a hacer labores que no eran de su carrera.

Es cierto, no era gratis el favor, pues en esos minutos que lo dejaban solo, frente a toda su informacion se enteraba de muchisimas cosas, evitaba caer en chismes de oficina, pero leia los rumores de la red.

Pero cuando se truena el sistema, la cosa es seria. Durante las primeras horas, todos seguian de buen humor, con un esplendido desayuno, mesas redondas de chismes y chistes, pero conforme pasaban las horas, la desesperacion empezaba a dominarlos.

El jefe seguia negando que viniera un proveedor a ayudarlos, el precio era alto, pero no se daba cuenta de que cada minuto de espera, teniendo a su gente ociosa, la empresa perdia mas. Siempre habia sido mal administrador.

Despues de la hora de la comida, el panico los invadio, los gritos comenzaron, decidieron entrar a la oficina del jefe y presionarlo que aceptara, levanto el telefono, pidieron un precio mas alto, pues era obvio que tendrian que mandar a alguien urgente, estaba a punto de aceptar, cuando el hablo.

Dijo "miren, puedo darle una revisada al sitema, pero voy a descuidar mi trabajo, si ustedes me ayudan, entonces tendre tiempo para componerlo"

Todos dijeron que si, y le pidieron sus papeles y su pc para terminar esos analisis que hacian falta, mientras el en un rincon, habria el msm para platicar con sus amigos y esperar a que llegara la hora de salida. De vez en vez algunos se le acercaban para preguntarle como iba y el decia, "voy bien" y solo fue cuando le entregaron su trabajo que dio la orden esperada por todos "reinicien sus maquinas, en cinco minutos tienen sistema" eran las seis de la tarde.

Tomo sus cosas entrego el reporte a su jefe, que lo tomo y sin revisarlo acepto que se fuera, hasta le dio las gracias por la ayuda "imbecil" penso, "estas agradecido porque te ahorre unos pesos"

Afuera de la empresa, rumbo a su casa, se pregunto si mejor hubiese sido, que su jefe pagara el servicio. Pero cuando el lunes regreso y vio la cara de todos, con sus ropas arrugadas, con ojeras, con pintas de no haberse bañado, malhumorados, algunos ese fin de semana cancelaron citas importantes, familiares, de amigos, de amantes, se sintio mejor. Los hizo sentirse, como el mismo.